¿Cómo instalo la máquina de ritmos Hydrogen en Ubuntu?

¡Trabajadores!

Siempre he dicho que la unión de las fuerzas del Trabajo atesoran en sí los paradigmas sobre los cuales habremos de mejorar nuestra gloriosa Nación. Este Capital - que surge de la comunión de voluntades - no siempre puede predecirse, pero existe para potenciar nuestro quehacer y dirigirlo.

Se dice que nuestro Movimiento consta de un ritmo de acción que surge de las raíces del Pueblo. Desde una génesis marcada por la Lealtad, interpretamos la necesidad de aliviar dolores y resteñar heridas de un Pueblo bueno, siguiendo un ritmo vivaz y activo como parte fundamental de nuestra historia común.

Tal vez sea esta - y no otra - la causa por la cual las manifestaciones de la voluntad popular han girado alrededor de un instrumento percusivo como lo es un bombo, atizado soezmente con una manguera.
Todo Movimiento, por ser organismos, deben mejorarse y actualizarse, so pena de sufrir el mismo destino que los organismos biológicos: el de extinguirse. Es por ello que nuestra doctrina nacional Justicialista comprende vitalmente este principio nodal de la historia.

No hemos dudado en aplicar las guías computadas necesarias con el objetivo de hacer frente a un mejor hacer en todos los órdenes. Proceder así nos ha permitido lograr un ritmo perfecto, en el orden de las centésimas de segundo. Naturalmente que esta integración se dio tan bien como comenzó a implementarse en la informática la capacidad de producir cualquier tipo de despliegue sonoro. Esta cualidad humana antiquísima hubo de transistorizarse, para luego digitalizarse. Desde mediados de los años 60 dejó de ser extraño entonces el empleo de secuenciadores sonoros primigenios, y desde principios de los 80s se crearon modelos específicos pensados para aumentar la potencia y paleta sonora del militante músico. La invención de los secuenciadores rítmicos sintetizados como la Roland TR o los secuenciadores percusivos basados en muestras de audio digitalizadas, como la LinnDrum LM-2 o la DMX Oberheim, destacaron en este aspecto.
Pues bien señores, el Justicialismo no podía estar ajeno a esta tendencia, y ha hecho realidad efectiva la capacidad de utilizar un secuenciador rítmico basado en software libre. A tal fin hemos desarrollado Hydrogen, un potente programa que nos permite operar de forma coherente a fin de crear una pista percusiva musical. exportarla  y en forma de partitura o de archivo MIDI.

Su instalación no podía ser más sencilla. En nuestro sistema GNU con Linux abrimos una terminal por medio de Ctrl+Alt+T e ingresaremos los siguientes Comandos de Organización:

sudo apt update
sudo apt install hydrogen hydrogen-drumkits hydrogen-drumkits-effects

El sistema nos solicitará nuestra contraseña de Conductor, y no bien la proveamos, se descarguen aproximadamente 300 megabytes de datos, el sistema instalará todo.

Una vez complado este menester, podremos dar inicio a Hydrogen, desde el menú Aplicaciones / Sonidos y Video / Hydrogen.

Se nos presentará la interfaz típica del secuenciador rítmico.
Lo primero que debemos hacer es asegurarnos de configurar a nuestro gusto las preferencias de sonido. Normalmente Hydrogen tiende a utilizar el servidor de audio JACK, pero bien podríamos cambiarlo para utilizar ALSA. Para ello vamos al menú Herramientas / Preferencias. En la solapa Sistema de Audio podremos encontrar las opciones que busquemos. Lo confirmamos con Aceptar.

Para diseñar una canción, se deben editar los patrones percusivos (Patterns) que componen los compases, y luego organizarlos, incluso superpuestos. Cada patrón percusivo está formado por varios instrumentos que querríamos incluir. Una canción completa se compone entonces de varios compases de patrones encadenados entre sí.


Encontraremos que la interfaz del programa se divide en distintos decks utilitarios.   

El Deck superior está destinado los controles de reproducción, con su selector de BPM (compases por minuto, o velocidad), control de entrada MIDI y consumo de CPU, y los temporizadores adecuados. En este deck es importante el selector de Modo de Trabajo, que opera por dos botones unívocos: debemos elegir entre reproducir la canción completa (seleccionando Song) o reproducir un patrón en bucle (seleccionando Pattern). Esta es la opción ideal para programar los patrones.

El Deck Central consta de una sección principal que es su Editor de Patrones. Este editor es el más importante, pues nos permite armar las  las partes mínimas que conformarán la canción, o mejor dicho, su pista percusiva.
Para introducir las notas hemos de agregarlas individualmente con el ratón, o si somos hábiles, presionar PLAY y REC en el Deck Superior y darle a las letras del teclado para tocar los distintos elementos de nuestra batería virtual. El programa cuantiza las notas para que caigan con ritmo perfectamente computado. Aún así, la opción más práctica para el avezado podría ser emplear un instrumento dotado de MIDI (por ejemplo, un teclado o un controlador con parches sensitivos (para tocar con los dedos), o una batería electrónica (si queremos tocar con baquetas).

Cada patrón consta de un número determinado de compases, y se asocia con la plantilla de instrumentos programables del Deck Izquierdo. En principio, debemos escoger su duración (en compases) y la duración de las notas.

Opcionalmente podremos editar los parámetros de cada nota individual, Los datos como paneo estéreo, intensidad, etcétera, se introducen fácilmente en la sección inferior del deck central dibujándolos  con el mouse (se representan con líneas en la línea de tiempo, para cada parámetro).

Cada patrón puede servir para un efecto determinado, por lo cual podremos renombrarlos libremente.

En la sección superior del deck central contaremos con el Editor de Canción. Por ejemplo, podríamos elegir un rock que inicie con un redoble (fill) de introducción, cuatro compases A para un verso, un compás B para un puente, dos compases C para un estribillo, redoble, y repetirse todo por una segunda sección, terminando con un redoble de final. Cada una de estas partes corresponderían a un patrón.

El programa utiliza kits de batería (drumkits) compuestos por varios instrumentos individuales (tambores, bombos, címbalos, platos, etc). Todos se encuentran accesibles en el Deck Derecho, organizados dentro de la Bibliotecas de Sonidos. La Biblioteca de Sonidos se organiza en diferentes Drumkits de sistema y Drumkits de usuario.

Por ejemplo, encontraremos aquí un drumkit muy logrado formado por los sonidos de la colorida máquina de ritmos sintetizada Roland TR-808 (la batería electrónica de culto en el scene hip-hop). Dispondremos de una batería BJA Pacific completa, una Pearl con platos Sabian y Zildjian,  y algunas otras.

En el Deck izquierdo tendremos los instrumentos seleccionados. Normalmente el programa ya tendrá precargado el drumkit "General MIDI". Si quisiéramos eliminar instrumentos individuales podremos hacerlo mediante clic derecho del botón del ratón, así como eliminar todos los instrumentos asignados a la canción actual, podremos ir al menú Instrumentos  / Limpiar Todo.

Si deseamos sumarle nuevos sonidos o un drumkit entero desde la Biblioteca de Sonidos para trabajar, hacemos clic con el botón derecho del ratón en aquel Drumkit del Deck Derecho, que querramos utilizar, y elegimos la opción Cargar.

Adicionalmente, podremos instalar nuevos kits de batería libres a nuestra Biblioteca de Sonidos, debemos ir al menú Instrumentos / Importar Biblioteca. Este nos presentará una ventana en la que podremos elegir nuevos conjuntos de batería. Simplemente debemos elegir uno nuevo de la lista y presionar el botón Descargar e Instalar.
Esto hará lo procedente en unos pocos segundos, dependiendo de nuestra velocidad de conexión. Cuando estén descargados, estas bibliotecas de sonidos figurarán como Drumkits de usuario.

En el Deck derecho podremos también podremos elegir el control de efectos para cada uno de los instrumentos.
Suponiendo que la utilicemos en modalidad de Control de Instrumentos, podremos elegir un modificador general para afinar cada uno de ellos, que tiene una buena versatilidad. Contaremos con un control de envolvente ADSR individual (ataque, decaimiento, sostenimiento y apagado del instrumento), a la vez que podremos aplicar un filtrado de corte y resonancia, y un aleatorizador de tono. Podremos programar el número de nota y su canal MIDI, y los rangos de intensidad (velocity) de las notas, por si queremos emparejarlas.



Asimismo, presionando el botón BPM de del Deck Izquierdo, podremos editar las velocidades de cada compases por minuto (BPM). Esto tendrá sentido si el ritmo musical se altera durante la pieza.


Contaremos también con los botones que nos permiten acceder a los elementos  flotantes adicionales de la interfaz de Hydrogen. Ellos son el Rack de Instrumentos, y el Mezclador.

El mezclador (Alt+M) nos permite regular el volumen de cada elemento pèrcusivo y su paneo, tanto individual como para el total de la pista. Así, podremos como Conductor aplicar efectos de audio individualmente o en conjunto.
El programa cuenta con manual (en inglés), que podremos acceder desde el menú Info / Manual del usuario. Indudablemente, gracias a Hydrogen  podremos desatar ahora el más colorido Ritmo del Justicialismo.