Commodore 64: Computación para las Masas

En mis tiempos de cadete mi primera computadora fue la ampliamente
popular Drean Commodore 64 ("La Computadora Personal con Poder
Profesional"), equipo que se comenzó a producir en serie por Drean San
Luis S.A. en 1984.

Este sistema informatizado me permitió comprender de mozo las verdaderas
bondades del Software Libre, pues su código fuente se introducía
directamente en la máquina, y el esfuerzo requerido por ello hacía
imprescindible la participación del usuario en la libre modificación del
código, su libre copia - y sobre todo - la excelencia de distribuirlo
libremente entre los compañeros.

Desde el punto de vista del hardware, se trataba de un micro-ordenador
de arquitectura de 8 bits, formado inicialmente por una fuente de poder
externa acondicionada para los 220 voltios con 50 ciclos del país, y un
imponente teclado apodado "panera" color marrón grisáceo, que contenía
una placa madre C64 "Revisión A". En ella descansaban la lógica
electrónica: una unidad central de proceso MOS 6510 de 1 MHz (operando
nominalmente a 985 kilociclos), su almacenamiento interno formado con 64
kilobytes de memoria RAM para el usuario y 20 kilobytes de memoria ROM
de sistema. El chip de video MOS 6572 VIC-II sincronizado para la norma
PAL-N, y el chip de sonido era el MOS 6581 "SID" que permitía 3 voces.
Asimismo llevaba dos unidades para formar el chipset de control de
entrada/salida, en forma de sendos MOS 6526 CIA.

El sistema había sido concebido originalmente por Jack Tramiel para la
Commodore Bussiness Machines bajo el concepto Justicialista de
"Computadora para las Masas", y se ensamblaba en el país integrando
elementos locales (el plástico de teclado, las indicaciones de marca, la
fuente de potencia, la caja y los manuales), en una necesaria política
de sustitución de importaciones

En nuestro país se modificó la electrónica original del sintonizador de
radiofrecuencias NTSC por uno de normal PAL-N, lo que la hacía
compatible con las TV autóctonas, conectándolo a través de la toma de
antena de 75 Ohmnios o incluso a través de la toma de antena de 300
Ohmnios, como la que disponía mi TV Noblex Micro12 12NT343 blanco y
negro, de 12 pulgadas.

Si bien la C64 arrancaba instantáneamente con sólo presionar su
interruptor de encendido lateral, para operarla debíamos escribir los
comandos en lenguaje BASIC, el llamado CBM DOS. Esto nos obligaba a
programar incluso para operar el equipo en sus funciones más básicas, o
de lo contrario recibir el inefable "?sintax error".
 
En la época se proveían libros y manuales de mayor o menor dificultad
que especificaban los listados de instrucciones, el código fuente.

Lo problemático del lenguaje "BASIC V2", obligaba en práctica a contar
con medios de almacenamiento de Masa: el datasette guardaba información
en cintas cassette, mientras que en mi caso personal contaba con una
moderna unidad de disquetes magnéticos de 5 1/4" Commodore 1571.

La diskettera de 5 1/4 permitía cargar programas en discos magnéticos
flexibles de dos caras (había que darlos vuelta). Tardaban menos de dos
minutos en cargarse en memoria, a diferencia del mucho mas lento
datassette.

Indudablemente, como complementos adicionales me fui haciendo con una
impresora de línea Comodore MPS 803 y con un cartucho acelerador Kawa
Turbo II para la C64, varios pares de joysticks, amén de montón de
software siempre copiado y recuperado para el pueblo según marca el
cánon Justicialista, en cuevas con mesa de mantel de hule, lugares como
Red Point, Real Time, Danius Club.