"La fiesta de presentación de la ARPANET: cuando las redes salieron al
escenario".

Era mediados de 1971. Diez científicos se encontraron en la Cuadra
Técnica del Instituto Tecnológico de Massachusetts en Cambridge. Habían
recibido la tarea del director de la Oficina de Procesamiento de
Información del Pentágono.

Ha llegado el momento - dijo Larry Roberts al grupo - de demostrar
públicamnete el mayor logro del TPTO: la Red de la Agencia de Proyectos
de Investigación de Avanzada (ARPA), la antecesora de la internet.

La red de datos ARPA "era virtualmente desconocida para todos quienes no
estuvieran en el círculo mas interno dentro de la comunidad de
investigación del cómputo" describen los historiadores de internet Katie
Hafner y Matthew Lyon en su libro "Where Whizards Stay Up Late. "Roberts
sabía que era momento de una demostración pública".

Se puso en campaña hace 40 años. El Presidente Nixon había nominado a
Lewis F. Powell y a William H. Rehnquist a la Suprema Corte. La Asamblea
General de las Naciones Unidas había votado para expulsar a Taiwán y
admitir a la República Popular de China. La ópera rock Jesucristo
Superstar se estrenaba en Broadway. Millones de norteamericanos se
enfocaban en esos eventos y no tenían noción de la importancia que
revestía el Proyecto ARPANET.

Pero pronto una masa crítica de científicos e ingenieros comprenderían
su relevancia. La demostración requiriño una planificación de un año. Se
llevó a cabo en la 1ra. Conferencia Internacional de Comunicación de
Computadoras en Washington, DC, en Octubre de 1972. Y cumplió lo que sus
organizadores esperaban de ella. "Muchos escépticos se convirtieron al
ser testigos de la robustez y respuesta del sistema", recuerda el
pionero telemático Vint Cerf. De esta reunión "pivot" surgió un nuevo
grupo de investigación dedicado a extender la causa de las distribución
de paquetes conmutados.

No sólo fue esta primera exhibición de ARPANET un momento crucial en el
desarrollo de las redes de datos, sino tamnbién, según todos los
testigos, resultó increíblemente divertida. Y de este modo, a través de
Hafner y la narrativa de Lyon, volvemos a contar la historia. 

Haciéndola realidad

A lo largo de 1971, la ARPANET fue expandiéndose desde sus cuatro
"nodos" iniciales localizados en UCLA, el Intituto de Investigación de
Stanford, la UC Santa Bárbara y la Universidad de Utah, hasta otros 15
nodos académicos. Las computadoras que administraban la conmutación de
paquetes y el enrutamento entre tales huéspedes y la red recibían la
designación de Interfaz de Procesadores de Mensaje (IMPs), construidos
por la firma de ingeniería Bold Baranek y Newman. Para septiembre de
1971 se había instalado un IMP Terminal (TIP) que permitía el acceso de
terminal directo a la red. Uno de los protocolos primigenios de las
redes, el Telnet, facilitaba conectarse a los internos de la ARPANET y
realizar varias tareas.

También se desarrolló un protocolo básico de correo electrónico, y
comenzaron a utilizarse las aplicaciones para transferencia de ficheros.
Pero "fueron los TIPs y Telnet los que juntos pavimentaron el camino
para una veloz expansión de la red", explican Hafner y Lyon. Un muembro
del grupo del MIT sugirió una presentación grabada en video para la
demostración. Al Vezza, del Proyecto MAC del MIT objetó duramente. El
show sería en vivo. Debía ser en tiempo real. "tiene que ser algo que
cualquiera pueda tocar y controlar simplemente sentándose a una
terminal".

Pero un evento en vivo representaba una apuesta enorme. Los creadores de
la ARPANET tenían una experiencia práctica relativmanete pequeña con
Telnet y el FTP. La demostración en la ICCC corría riesgo cierto de
fracasar estruendosamente... pero si funcionaba "demostraría que la red
de datos no sólo era algo real, sino útil".

A lo largo de casi un año, Bob Kahn de BBN y Vezza viajaron por el país
buscando proveedores de la industria de la computación que quisieran
traer equipamiento que pudiese usar el TIP para conectarse a la ARPANET.
La idea era simple: los visitantes de la Conferencia y el público
general se sentarían en las máquinas, se conectarían, y accederían a la
red de datos. Harían cosas con las aplicaciones de ejecución remota.
Podrían encontrar ficheros en las computadoras distantes e imprimirlos.
Con eso entenderían. 

Tortuta Loca

Un consumado ejército de vendedores, estudantes graduados y gente de
ARPA comenzaron a armar la logística necesaria para la demostración, y
apareció "un cierto pánico". De hecho, Roberts y Kahn habían calculado
esto y lo esperaban. Habían considerado la conferencia como el punto
temporal en el cual se impulsaría a la red de datos a perfeccionarse a
sí misma. El show estaba preparado "para obligar que la utilidad de la
red se presentase a los usuarios finales", explicaría luego Bob Kahn.

Para comienzos de octubre de 1972, todos corrían como locos. El gran
momento sería la mañana del lunes, el 24 de Octubre, en el DC Hilton. El
evento duraría dos días y medio. "Si alguien hubiese tirado una bomba en
el Washington Hilton, hubiese teventado a casi toda la comunidad de
redes de datos existente por entonces en los Estados Unidos", recuerda
Kahn. Pero para el miércoles antes de que abriera la conferencia, eñ TIP
de Bolt Baranek "estaba como un rey en su trono de cables, que salian
por todos los rincones de la habitación".

El equipo invirtió el domingo luchando con problemas técnicos. El
pionero de las redes John Postel se sentó en el área de exhibición,
enlazó con el host de ARPANET de UCLA. Armó una demostración por si
mismo, en la que permitió a los usuarios solicitar un documento desde
Boston a través de la computadora huésped de UCLA, y luego imprimirla
allí en el Hilton.

Pero cuando Postel intentó llevar a cabo esta demostración, la impresora
junto a él quedó muda.

    Miró en toda la sala. Había muchas otras demostraciones, una de las
    cuales incluia una pequeña tortuga robótica construida en el MIT. La
    tortuga estaba construida para demostrar como un niño podía escribir
    un programa de computadora para dirigir el movimiento de una
    máquina. Los niños podían escribir sus propios programas en un
    lenguaje LOGO que diría "ve a la izquierda, ve a la derecha, ve
    adelante, retrocede, muevete lateral", y cuando ejecutaban el
    programa, la tortuga haría eso. En ese momento, sin embargo, la
    tortuga saltaba arriba y abajo, giraba y se sacudía locamente. En
    lugar de enviar el fichero de Postel a la impresora, el sistema la
    había enviado directamente al puerto de la tortuga robótica.

Alrededor de Postel y su tortuga otros proveedores y desarrolladores
configuraban sus aplicaciones: juegos de ajedrez, trivias de geografía,
un lector de noticias de la Associated Press, y un simulador de Control
de Tráfico Aéreo. Todos se prepararon para el gran momento. 

La he matado

Finalmente llegó la mañana del lunes 24 de octubre. Los presentes en la
conferencia recorrian la exhibición. Una estudiante se sentó en una
terminal, siguó algunas instrucciones, e intentó acceder a una
computadora que probablemente no estaba operativa en ese momento.

"EL HUÉSPED HA MUERTO", llegó a través de la línea como respuesta.

"Por dios, la he matado!", gritó en pánico.

Otros dos presentes se sentaron en las terminales y tuvieron una
experiencia que mas adelante sería compartida por millones de usuarios
de teléfonos celulares cinco décadas después. Ambos se conectaron al
huésped de la Universidad de Utah y accedieron al protocolo TALK.

"Donde estás?" tecleó uno.

"Estoy en Washington", contestó el otro.

"Dónde?"

"En el Hilton".

"Ah! Yo también estoy en el Hilton".

Por supuesto, ambos estaban prácticamente sentados uno al lado del otro.

Tal vez la aplicación más famosa demostrada en el evento de la ARPANET
eran dos programas de charla automáticos, el PARRY y ELIZA - este último
también conocido como El Doctor. El psiquiatra de Stanford Kenneth Colby
había programado PARRY en 1972 como un programa de respuestas que
simulaba a un psicótico paranoide. Joseph Wiezenbaum del MIT había
creado a El Doctor a mediados de la década de 1960. Imitaba las
preguntas parsimoniosas de un psiquiatra rogeriano.

Un mes antes de la exhibición UCLA preparó un diálogo entre El Doctor y
PARRY. Tuvo lugar algo así:

    "Buenas noches. Cuénteme sus problemas," empezó El Doctor. "Por
    favor finalice su entrada con un punto o un signo de interrogación."

    PARRY: *Las apuestas no han sido más que problemas para mí.

    El Doctor: Porqué dice eso justo ahora?

    *Tengo experiencia con ladrones apostando en el hipódromo.

    No estoy seguro de entenderlo completamente.

    *Ya le he dicho suficiente sobre eso.

    Oh? Cree que etngo suficiente de eso?

    *Fue a las carreras.

    Por favor, continúe.

    *Sabe algo de los corredores de apuestas?

    Que le hace pensar que sé algo sobre corredores de apuestas?

    *Una vez un corredor no me pagó.

    Qué le sufiere esto a usted?

    *Golpeé al corredor que no me pagó, y he pensado que podría usar sus
    amigos en la mafia para saldar las cuentas conmigo.

    Qué mas le gustaría discutir?


Un momento esclarecedor

En los siguientes tres días, cientos de personas probaron los programas,
accedieron a las redes de datos, y se maravillaron con la ARPANET. 

No todos vinieron con la mente abierta. Robert Metcalfe luego describió
los resultados de su trabajo desagradecido ofreciendo a un grupo de
Vicepresidentes de AT&T un tour de exibición. Demostró el sistema, y sin
intención confirmó la vieja e infortunada quasi-certeza. Cuando intentes
mostrarle a los escépticos una nueva tecnología, será el momento en el
que fallará.

"Entonces estaba mostrando el sistema, y por única vez en toda la
exposición, el TIP se colgó", recuerda Metcalfe. "La única vez".

    Se cayó por diez o veinte segundos. Finalmente volvió.
    Reestablecimos la conexión y nunca volvió a caer. Pero fue un
    momento muy exclarecedor para mí porque cuando miré, estaban
    contentos de que se hubiese colgado. No tenían razón para ocultar su
    felicidad. Porque esto había confirmado que el conmutado de circuito
    era mejor y más confiable que el conmutado de paquetes, que era
    problemático, y que nunca funcionaría. Y yo había estado trabajando
    en esto por dos o tres años, y realmente me molestó.

Irónicamente, había sido AT&T la encargada de proveer los enlaces de
datos cruciales para la exhibición. Pero como notaron Hafner y Lyon,
muchos otros se fueron del show como verdaderos creyentes. "La
demotración ICCC hizo más en establecer la viabilidad del conmutado de
paquetes que cualquier otra cosa antes de ella", concluye su pasaje
sobre la exhibición. "Como resultado, la comunidad de ARPANET se ha
ganado un sentido de si misma y de su tecnología mucho mayor, y eso
asegura recursos a su disposición".

De la reunión surgió una alianza crucial, el Grupo de Trabajo
Internacional de Red de Datos de Paquetes, que estudiaría maneras de
conectar las redes de paquetes conmutados que emergerían a lo largo del
mundo. La Internet era una realidad en camino.

"Aquí pudimos mostrarlo", recuerda el pionero de internet Leonard
Kleinrock. "Nosotros sabíamos que funcionaría". Incluso aunque tuviese
algunos problemas, eran cosas que se podían solucionar. Fue una
experiencia maravillosamente excitante".